Centro Cristiano Adonai Garnerville NY

La resurrección de Cristo es el fundamento de nuestra fe. Hay muchas personas que piensan que es suficiente creer que Jesús vivió y murió. Sin embargo, la restauración de la vida del Salvador es fundamental para lo que afirmó sobre su identidad y para el cristianismo como fe. Entonces debemos preguntarnos, ¿qué clase de hombre es este que resucitó de entre los muertos? La respuesta es que Jesucristo es el Hijo de Dios, quien murió por nuestros pecados y resucitó porque la muerte no tiene poder sobre él. La resurrección validó el ministerio de Jesús. Todo el tiempo, dijo e hizo cosas para revelarse como Señor. Cuando el Cordero de Dios, el sacrificio perfecto por el pecado, conquistó la muerte, confirmó su identidad. Aparte de la resurrección de Jesús, no hay esperanza. ¿Pondrás tu esperanza en Jesucristo?

Los hombres que viajaban con Jesús en una tormentosa noche de Galilea dijeron algo que debería hacernos sentarnos y tomar nota: "¿Qué clase de hombre es este?" Si nos hacemos esa misma pregunta, comenzaremos a ver el panorama general de quién es Jesucristo en lugar de concentrarnos en las facetas de su personalidad reveladas por las historias individuales. La escritura indica que tanto el aire como el agua se calmaron instantáneamente. Tal es el poder de Jesús, el Creador y el Señor sobre el universo. En conjunto, todas las historias bíblicas sobre Jesús revelan el "panorama general" de que Él es el único hombre digno de gloria, honor y alabanza. A Dios sea toda la gloria y el honor. Se bendecidos amigos

¿Cuál es tu visión de Dios? ¿Lo ves como Aquel que puede manejar cada desafío que le presentas? Nehemías conoció al Padre de esta manera. Al enterarse de la destrucción de Jerusalén, lloró, ayunó y oró por la intervención. Tener la visión correcta del Señor nos permitirá acercarnos a Él con absoluta confianza. Y sabemos que Él escuchará y contestará nuestras oraciones (Salmo 86: 7). Recuerde, Él es absoluto en fidelidad e infinito en poder. Nuestro Padre celestial es el gobernante sobre todo. Amén. Se bendecidos amigos